Privacidad, transparencia y consentimiento en las webs

En los últimos años, la privacidad en el ecosistema digital se ha convertido en un tema de preocupación creciente para anunciantes y organismos reguladores. A medida que las empresas recopilan cada vez más datos sobre sus usuarios, surge la cuestión de cómo garantizar que los usuarios tengan el control sobre sus datos y que las empresas los utilicen de manera responsable. Es por eso que la transparencia y el consentimiento se han convertido en conceptos clave para proteger la privacidad en línea.

Bajo este contexto han ido apareciendo regulaciones de privacidad como la GDPR en la Unión Europea ,la CCPA en California (EEUU), LGPD en Brasil y leyes de privacidad similares en todo el mundo.

Pero, ¿qué son las cookies y para qué se utilizan?

Las cookies son pequeños fragmentos de texto que se almacenan en nuestros navegadores, aplicaciones o dispositivos. Gracias a ellas, las webs son capaces de recordar nuestra información de sesión ofreciendo una mejor experiencia, personalizando contenido o protegiéndonos del fraude cuando interactuamos con un servicio.

Según quien sea quien gestione el dominio desde dónde se envían las cookies y se traten los datos que se obtengan, se pueden distinguir dos tipos: cookies propias y cookies de terceros. A su vez, en función del uso que vaya a hacer de las mismas encontramos: técnicas, analíticas, publicitarias o de personalización.

Con el fin de gestionar la aceptación o denegación del usuario a estas cookies, los banners de consentimiento se han convertido en un elemento indispensable para cualquier experto en marketing digital.

Si bien ayudan a regular y gestionar el consentimiento que hasta ahora se hacía de una forma tácita, en un mundo cada vez más consciente con la privacidad, también han permitido construir promesas de transparencia con los usuarios garantizando que comprenden qué datos están siendo recopilados y cómo se van a utilizar. Además de ofrecer la opción de acceder, modificar o eliminar el consentimiento otorgado en cualquier momento.

Con el fin de cumplir con las obligaciones legales, las organizaciones deben de utilizar este recurso para recoger el consentimiento del usuario que debe ser libre, informado y accesible.

¿Cómo funciona un banner de cookies?

Bajando a la práctica, un banner no deja de ser un pop-up que se muestra en las webs y aplicaciones cada vez que un usuario visita el site por primera vez. Una vez desplegado, se hace visible la lista de proveedores que utilizan cookies y el uso que dan a los datos recogidos.

Para que la lógica funcione, se establecen una serie de categorías y finalidades que se relacionan al proveedor de la cookie. Así, cuando el usuario comparte su consentimiento, el backend de la tecnología del banner informa a través de eventos JavaScript qué ha sido lo que ha aceptado o denegado. De esta forma se construye una capa de datos que se utiliza para regular el disparo de las cookies, ya sea via Tag Manager o código fuente.

Desde Annalect trabajamos diariamente con nuestros proveedores y clientes conjuntamente para poder desarrollar soluciones personalizadas a las necesidades, cumpliendo siempre con la legislación pertinente.

 

Celia Ruiz Fernández, Senior Adtech.